sábado, 29 de noviembre de 2014

El Ritmo

Tenemos los ojos cerrados.

No vemos lo que hay delante de nuestras narices.

A veces queremos abrir los ojos.
A veces queremos seguir con los ojos cerrados, porque es cómodo.
Otras, alguien quiere abrirnos los ojos. Incluso a la fuerza.

Pero así no funciona.
Si abres los ojos a la fuerza, si los abres demasiado deprisa, la luz te dejará ciego.

Cada persona tiene su ritmo para abrir los ojos, cada uno necesita procesar las realidades de una forma diferente.
Y tú no puedes obligar a nadie (ni a ti mismo) a abrir los ojos. Puedes ayudar, dar herramientas, pero debes dejar que suceda por su por si solo.

Porque todos hemos nacido sin saber. A nadie deberían cerrarle los ojos contra su voluntad.
Y nadie debería ser obligado a abrir los ojos antes de tiempo.

Encuentra el ritmo

2 comentarios: