Dicen que cuando nacemos, somos como una hoja en blanco.
En teoría, esto no es exactamente así, por genética tenemos predisposiciones, por ejemplo a ser más o menos altos, a tener cierto carácter o a padecer ciertas enfermedades.
Con este molde genético, vamos creciendo y nos desarrollamos como personas, gracias a nuestro entorno y circunstancias.
Entonces, yo me pregunto, ¿de dónde sale la malicia?
Y es que hay gente que parece DISFRUTAR haciéndoles daño a los demás.
En mi vida he conocido a varias personas así. Es como si tuviesen un gen malvado que les impidiese sentir compasión.
O quizás ese sea mi punto de vista.
Y me sorprende mucho que esta gente juzgue a los demás deliberadamente, sin sensibilidad, sin preguntarse "¿Qué hay detrás?"
Todos tenemos pensamiento crítico. Todos tenemos opiniones.
Pero los juicios son algo un poco diferente.
Los juicios condenan.
Después de todo somos humanos.
Imperfectos. Llenos de problemas.
Frágiles. Personas.
Cómo persona, prometo hacer todo lo que esté en mi mano por no juzgar ni a los demás, ni a mi misma.
Prometo intentar ponerme en los zapatos de la otra persona.
Prometo esforzarme por ser mejor y más humilde.
Prometo resistir.
Abre los ojos, todos somos personas
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