viernes, 23 de mayo de 2014

Caminos

"Tienes que hacer algo, no puedes quedarte quieto" "No logras nada mirando atrás"

Avanzar.
No quedarse estancados y cambiar.
Esto es lo que se supone que debemos hacer, lo que nos enseñan desde bien pequeños.
Porque si no corres te quedas atrás y eres el último, pierdes.

Pero siempre olvidan que avanzar por avanzar es inútil.
Se llega a alguna parte, sí, pero ¿a dónde querías llegar tú?

Hay que avanzar en una dirección.

Por eso, a veces la mejor forma de avanzar es volver hacia atrás, "ante la duda, desandar lo andado resulta ser la opción más sabia".

Y esto es así, porque muchas veces cuando caminamos, vamos perdiendo nuestra esencia y olvidamos por qué empezamos a caminar y a dónde queríamos ir.

Porque para llegar a dónde queremos, primero tenemos que saber qué queremos.
Y para saber qué queremos, debemos encontrarnos a nosotros mismos.


Encontrarte es encontrar tu camino




Caminante son tus huellas 
el camino y nada más. 
Caminante no hay camino, 
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino 
y al volver la vista atrás 
verás la senda que nunca 
has de volver a pisar. 
Caminante, no hay camino, 
sino estelas en la mar.

A.Machado 

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